El que es considerado el valor refugio por excelencia, no está exento de riesgos si no sabemos cuándo es el mejor momento para invertir en él. Te contamos si nos encontramos en un buen momento para invertir en oro o si, por el contrario, es una buena idea esperar un tiempo hasta que los mercados se estabilicen.
Cuando escuchamos hablar de valores refugio, es complicado no relacionar este concepto al oro. Históricamente, el que es considerado el material preciado por excelencia siempre ha concentrado la inversión tanto de personas como instituciones que buscaban un instrumento conservador en el que nuestra primera inversión. A contaminación, te respondemos a esta pregunta y te contamos cuáles son los riesgos y las ventajas que podremos encontrar si nos decantamos por esta vía.

Por qué deberías invertir en oro en 2025
Durante los últimos meses, pequeños y grandes inversores se han visto sumergidos en un contexto muy volátil en el ámbito bursátil. La guerra arancelaria iniciada por la istración Trump contra la inmensa mayoría de los países del mundo ha sacudido los mercados y ha provocado varios días consecutivos con bajadas históricas sucedidos de jornadas en las que el verde ha teñido el parquet con una euforia nunca vista antes.
Si existe una palabra que pueda describir el panorama actual es la de incertidumbre. Una noticia desde Estados Unidos por parte de Donald Trump puede ser más que suficiente para ver cómo nuestras acciones pierden valor de un día para otro, sin que exista ningún motivo que justifique dicho cambio de tendencia.
El contexto de inestabilidad política y económica ha creado un escenario que reúne todos los ingredientes para que el otro se haya convertido en una excelente opción en la que depositar nuestro dinero, aunque siempre hay que considerar tanto sus ventajas como los riesgos a los que estamos expuestos.
Cuáles son las ventajas del oro
Comenzamos con las ventajas. Son muchos los motivos que posicionan al oro como una de las mejores opciones que tenemos a la hora de realizar cualquier inversión. De entre todos ellos, destacan los siguientes.
Un valor refugio
Como ya hemos anticipado, el oro es considerado el valor refugio por excelencia. Una de las principales ventajas que nos ofrece el oro es que nos ayuda a proteger nuestra inversión de la inflación y, al mismo tiempo, reduce la incertidumbre en comparación con las acciones bursátiles u otro tipo de inversiones.
Los metales preciosos siempre se han caracterizado por mantener su valor con el paso del tiempo. Además, en el largo plazo también nos ofrece un extra de rentabilidad que suele superar al coste de la inflación.
Protección contra la inflación
Continuando con la inflación, el oro suele mantener una tendencia inversa a la del valor del dinero. Cuando el euro pierde valor, como ocurre en épocas inflacionistas, el precio del oro va en aumento. Por lo que la inversión en este metal nos generará una cierta rentabilidad que se situará por encima del precio del dinero.
Un producto muy líquido
Otra de las ventajas que ofrece es que tiene una gran liquidez en todo el mundo. En cualquier parte del mundo, el oro tiene la misma consideración de metal preciado y, por ende, podemos convertirlo en dinero si lo necesitamos en cualquier momento.
Esto contrasta con otro tipo de inversiones que requieren de una búsqueda del cliente hasta poder venderlo y obtener liquidez. Por lo tanto, no solo nos permite lidiar contra la inflación, además, nos permite acceder a líquido en cualquier momento.
Diversificación
Por último, esta no es una ventaja propiamente del oro. Pero sí que está bien tener en cuenta que cuando realizamos cualquier tipo de inversión, buscar la diversificación de nuestras inversiones es fundamental para protegernos del riesgo. Y esto lo podemos conseguir teniendo nuestro dinero invertido en distintos sectores, como puede ser la propia bolsa, el oro y el inmobiliario, entre muchas otras.
¿Y los riesgos?
Como cualquier otra inversión, el oro no está exento de riesgos. Aunque estos están bastante limitados, es importante tenerlos presentes para tomar una decisión entendiendo cuáles son todas las implicaciones que tiene.
Rentabilidad en el largo plazo
Uno de los principales hándicaps a tener en cuenta es que la rentabilidad la obtendremos en el largo plazo. Es decir, si lo que buscas es un producto financiero en el que inviertas dinero hoy y puedas recuperar tu inversión con beneficios en unos pocos meses, probablemente esta no sea la mejor opción que tienes a tu disposición.
Un rendimiento más bajo que otras inversiones
Incluso en el largo plazo, el oro nos ofrece un rendimiento algo inferior al que obtendríamos en otras inversiones. Esta es la consecuencia principal de que se trate de un valor refugio y muy poco volátil.
Sin embargo, al mismo tiempo que genera un rendimiento menor, el riesgo al que estamos expuestos también es bastante inferior.
No genera ingresos pasivos
Otra desventaja que sí que encontramos en inversiones como el inmobiliario es que no nos ofrece ingresos pasivos. Esto es algo que sí que podríamos tener en el caso de invertir en acciones que paguen dividendos o que invirtamos en inmobiliario.
Requiere de espacio para almacenarlo
Por último, es necesario señalar que al tratarse de un bien material, requerirá de un espacio de almacenamiento. Aunque ya te adelantamos que para que esto sea un problema, deberíamos de hacer una inversión de bastantes ceros, por lo que no sería un riesgo como tal para el común de los mortales.
Como hemos podido comprobar, invertir en oro en 2025 es una excelente idea, dada las ventajas que nos ofrece y el contexto económico de incertidumbre en el que nos encontramos. Es importante analizar bien las ventajas y los riesgos para tener claro en qué estamos invirtiendo.